UNA NUBE DE MENTIRAS

LAS ESTRATEGIAS DE LAS TABACALERAS

Las tabacaleras gastan 25 millones de dólares por día en publicidad y utilizan diversas tácticas de marketing para naturalizar el consumo de sus productos y captar nuevos consumidores, especialmente jóvenes.

Las estrategias van desde la contratación de influencers para que difundan sus productos en redes sociales -sin revelar sus acuerdos comerciales con las marcas-; el patrocinio en eventos como las carreras de Fórmula Uno; la aparición en videos musicales, películas, series y otros medios populares, hasta la financiación de becas y publicaciones académicas sesgadas.

La industria tabacalera, además, encontró en los cigarrillos electrónicos una manera de reinventarse, bajo la promesa de un producto más “seguro”, con sabores dulces o frutales, diseños coloridos, sofisticados y tecnológicos, que los hacen particularmente atractivos para niños, niñas y adolescentes.

A través de los vapeadores, la industria tabacalera encontró la forma de resistir frente a los avances en las políticas públicas que protegen la salud y restringen la promoción de productos de tabaco y nicotina.

Si alguna vez usaste un vapeador, te hablaron de uno o te dio curiosidad, tenemos algo que contarte: no emiten vapor de agua, ni son inofensivos.

A través de los vapeadores, la industria tabacalera encontró la forma de resistir frente a los avances en las políticas públicas que protegen la salud y restringen la promoción de productos de tabaco y nicotina.

Si alguna vez usaste un vapeador, te hablaron de uno o te dio curiosidad, tenemos algo que contarte: no emiten vapor de agua, ni son inofensivos.

DERRIBAMOS 4 MITOS SOBRE LOS VAPEADORES QUE LA INDUSTRIA SE ENCARGÓ DE INSTALAR PARA SEGUIR ENTRANDO EN LOS PULMONES DE LAS PERSONAS:

MITO 1

"VAPEAR NO ES FUMAR. ES SOLO ASPIRAR VAPOR DE AGUA"

Los vapeadores no generan vapor de agua. Lo que se inhala es otra cosa.
Los vapeadores se basan en la volatilización (hacer “niebla”) de distintos compuestos para administrar sustancias químicas tóxicas, dentro de los cuales se encuentra la nicotina.

La mayoría tiene alcoholes y derivados, también saborizantes. Incluso puede contener uranio, plomo y cadmio en su composición. Se estima que solo entre el 10% y el 20% restante de los líquidos corresponde a agua. Claramente, esto se aleja mucho de la idea que tenemos del vapor, compuesto 100% de agua. Por eso, para evitar confusiones y asociaciones incorrectas, deberíamos llamarlo por su verdadero nombre: “cigarrillo electrónico” y no “vapeador”.

MITO 1

"VAPEAR NO ES FUMAR. ES SOLO ASPIRAR VAPOR DE AGUA"

Los vapeadores no generan vapor de agua. Lo que se inhala es otra cosa.
Los vapeadores se basan en la volatilización (hacer “niebla”) de distintos compuestos para administrar sustancias químicas tóxicas, dentro de los cuales se encuentra la nicotina.

La mayoría tiene alcoholes y derivados, también saborizantes. Incluso puede contener uranio, plomo y cadmio en su composición. Se estima que solo entre el 10% y el 20% restante de los líquidos corresponde a agua. Claramente, esto se aleja mucho de la idea que tenemos del vapor, compuesto 100% de agua. Por eso, para evitar confusiones y asociaciones incorrectas, deberíamos llamarlo por su verdadero nombre: “cigarrillo electrónico” y no “vapeador”.

MITO 2

"Son la mejor opción para dejar de fumar"

Según la Organización Mundial de la Salud, la evidencia científica es insuficiente para concluir que los cigarrillos electrónicos sean una ayuda eficaz para dejar de fumar. En realidad, aumentan las chances de caer o reincidir en el consumo de cigarrillo.

Para dejar de fumar se sugiere usar métodos tradicionales, como la psicoterapia y las terapias de reemplazo de nicotina.

MITO 2

"Son la mejor opción para dejar de fumar"

Según la Organización Mundial de la Salud, la evidencia científica es insuficiente para concluir que los cigarrillos electrónicos sean una ayuda eficaz para dejar de fumar. En realidad, aumentan las chances de caer o reincidir en el consumo de cigarrillo.

Para dejar de fumar se sugiere usar métodos tradicionales, como la psicoterapia y las terapias de reemplazo de nicotina.

MITO 3

"Los cigarrillos electrónicos no son peligrosos, no hacen nada"

Los cigarrillos electrónicos no son inofensivos. En realidad aumentan el riesgo de:

Además, “vapear” en ambientes cerrados hace que queden residuos de nicotina y otras sustancias en el ambiente. Es decir, aunque no vapees, te lo fumás igual.

MITO 3

"Los cigarrillos electrónicos no son peligrosos, no hacen nada"

Los cigarrillos electrónicos no son inofensivos. En realidad aumentan el riesgo de:

Además, “vapear” en ambientes cerrados hace que queden residuos de nicotina y otras sustancias en el ambiente. Es decir, aunque no vapees, te lo fumás igual.

MITO 4

“Igual… Son más seguros que los cigarrillos comunes, ¿no?”

No es tan así. Contienen varios de los mismos químicos presentes en los cigarrillos tradicionales. Para colmo, las tabacaleras publican estudios pagados por ellas mismas para promocionar sus productos y hacer creer que son sanos. Necesitamos más estudios sin conflictos de interés que evalúen de manera certera y confiable los efectos de su uso en nuestra salud.

Desde hace 80 años, las tabacaleras usan poderosas estrategias de marketing para desvirtuar la evidencia científica existente, engañar a las personas y sortear las políticas de control de tabaco. Ahora repiten sin parar que los cigarrillos electrónicos son “productos de riesgo y daño reducido” y que buscan ser “actores de salud pública” para luchar contra el tabaquismo: ¡Un problema que ellas mismas generaron!. Si siempre fueron el problema, ¿por qué ahora serían parte de la solución?

MITO 4

“Igual… Son más seguros que los cigarrillos comunes, ¿no?”

No es tan así. Contienen varios de los mismos químicos presentes en los cigarrillos tradicionales. Para colmo, las tabacaleras publican estudios pagados por ellas mismas para promocionar sus productos y hacer creer que son sanos. Necesitamos más estudios sin conflictos de interés que evalúen de manera certera y confiable los efectos de su uso en nuestra salud.

Desde hace 80 años, las tabacaleras usan poderosas estrategias de marketing para desvirtuar la evidencia científica existente, engañar a las personas y sortear las políticas de control de tabaco. Ahora repiten sin parar que los cigarrillos electrónicos son “productos de riesgo y daño reducido” y que buscan ser “actores de salud pública” para luchar contra el tabaquismo: ¡Un problema que ellas mismas generaron!. Si siempre fueron el problema, ¿por qué ahora serían parte de la solución?

Todo una nube de mentiras:

VAPEAR ES FUMAR

Te dejamos más data sobre este tema:

Evidencia científica sobre el cigarrillo electrónico

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